CON MUCHAS PRETENSIONES

El término “cocina sin pretensiones” es uno al que cada vez le tengo más ojeriza: ¿Sin pretensiones de qué? Es lo primero que pienso cuando lo leo o cuando un cocinero lo dice con humildad. Pareciera que es un justificativo para decir que es una cocina que no llega a ser gran cocina, y casi siempre es un sinónimo de cocina casera… como que si lo casero nunca es gran cocina. Todos los viernes Sylvia y yo atendemos en nuestra casa en un espacio que hemos llamado @vallededumel con un menú. Un ayudante y yo cocinamos para quiénes vienen, Sylvia atiende las mesas. Obviamente no lo hago por negocio porque de viernes a viernes nadie se hace rico. Lo hago porque amo atender gente, cocinarles, sentir que son familia extendida, escucharles cuando quieren hablar y callar cuando no me quieren cerca. Anoche cociné una sopa de lentejas germinadas con chorizo, parmesano, perejil y aceite de oliva. Luego una carne hecha al sousvide y ahumada, con papas horneadas con pimiento ...